El Gobierno de Giorgia Meloni ha presentado sus nuevos Presupuestos para 2023 con un gasto de 35.000 millones de euros, algo que consideran "prudente ante la actual situación económica" y que en su mayoría, aproximadamente unos 21.000 millones, estarán destinados a ayudar a familias y empresas. 

De ese presupuesto, se destinarán 4.200 millones de euros para reducir la cuña fiscal a los trabajadores de bajos ingresos, es decir, se reducen lo que conocemos como cuotas sociales en los salarios más bajos. No sólo eso, sino que se introduce un tipo impositivo único del 15% para autónomos con ingresos anuales de hasta 85.000 euros. Y si nos fijamos en el IVA, se reduce del 10% al 5% el de productos de higiene femenina y pañales y productos para bebes.

Habrá una amnistía fiscal para deudas de hasta 1.000 euros y se podrá acceder al fraccionamiento de los pagos de impuestos no abonados en 2022 sin penalizaciones ni intereses adicionales para todos aquellos a los que el covid les haya afectado en sus cuentas. También se incluye el aumento de los pagos en efectivo, y se acaba con los impuestos adicionales que se gravaron al plástico y a los alimentos y bebidas azucaradas.

 A la Renta de Ciudadanía solo tendrán acceso las personas que, o no puedan acceder al mercado laboral, o estén en situación de vulnerabilidad, y para las personas que puedan trabajar y que se encuentren desempleadas, podrán acceder, pero solo durante ocho meses y después se eliminará

 Meloni quiere incentivar la natalidad, y además de la rebaja del IVA que hemos mencionado más arriba, plantea en los Presupuestos aumentar la asignación por hijo, siendo mayor tanto para el primer hijo como para las familias de tres o más hijos, se duplicará la tarifa plana de familias numerosas, pasando de 100 a 200 euros al mes. También se aumentará el permiso de maternidad un mes y se prevé la financiación de campamentos de verano y de actividades extraescolares. 

Se constituye un fondo de 500 millones de euros, destinado a personas con ingresos inferiores a 15.000 euros anuales, estará gestionado por los municipios y se emplearan para la compra de productos de primera necesidad, algo así como unos "cheques de compra" para usar en puestos de venta participantes de la iniciativa. 

En cuanto a las rentas más bajas, se elimina lo que en España entendemos como el Ingreso Mínimo Vital, la denominada Renta de Ciudadanía, el subsidio para desempleados que aprobó el Movimiento 5 Estrellas en la anterior legislatura, y que consistía en un 'sueldo' estatal de 780 euros para toda persona en paro, que podían recibir durante 18 meses, que eran renovables sin máximo estipulado. Vamos, un sueldo para siempre jamás y a cambio de nada.

A esta ayuda, solo tendrán acceso las personas que, o no puedan acceder al mercado laboral, o estén en situación de vulnerabilidad, y para las personas que puedan trabajar y que se encuentren desempleadas, podrán acceder, pero solo durante ocho meses y después se eliminará: durante estos ocho meses estarán obligados a participar en cursos de formación laboral y si no aceptan una oferta de trabajo "razonable" perderán el subsidio automáticamente. Esto será así durante 2023, pero el plan de Meloni es acabar por completo con este subsidio en 2024. 

Con el ahorro que supondrán estas medidas, se contemplan incentivos fiscales para las empresas que contraten de manera indefinida a mujeres menores de 36 años o a aquellas personas que cobraban esa Renta de Ciudadanía suprimida. 

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