El diario El País ha hablado con las dos personas que, según la investigación del ‘Caso Negreira’, más veces cobraron en efectivos los cheques con los que el Barcelona pagaba a Enríquez Negreira. Se trata de un amigo del ex número 2 de los árbitros españoles (al que El País se refiere como Antoni para conservar su anonimato) y de su secretaría, que responde a las siglas de C.D.

De la conversación con ambos se desprende la sorpresa por la cantidad de dinero que generaba una empresa dedicada a artículos de regalos.

“Mi gran incógnita era cómo le iba tan bien con una empresa de regalos, que vendía bolígrafos para empresas. Nunca me dijo que cobraba del Barça, ni yo le pregunté”, dice Antoni. “Me pedía que fuera a cobrar talones al banco. Estuve cobrando durante tres años. Lo hice en unas 50 ocasiones, a veces cada dos o tres días. Siempre eran cantidades inferiores a 3.000 euros.

Recuerdo, porque se repetía mucho, la cifra de 2.850 euros”, relata. En el periodo 2016-2018 (el que investigó la Agencia Tributaria), el club azulgrana pagó 1,4 millones de euros al número dos de los árbitros por supuestas asesorías verbales de las que no hay rastro alguno y que, según la hipótesis de la acusación pública, sirvieron para buscar el favor de los árbitros. Casi una tercera parte de ese dinero (550.000 euros) se retiró en efectivo.

 Esas constantes retiradas de efectivo son las que han alertado a las autoridades, aunque por el momento no se ha conseguido seguir el rastro de ese dinero, por lo que es, al menos por el momento, imposible afirmar si se usó para pagar a terceros o, como afirma Negreira, fue él el único beneficiario. “Su vida consistía en gastar y gastar. Le gustaban los mejores restaurantes, los mejores coches… Yo te diría que se ha quemado los siete millones”, afirma Antoni.

En cuanto a los servicios prestados al Barça, Antoni considera que “ha vendido humo al Barça y ha estado viviendo como un marajá”.

La secretaria de Negreira por su parte asegura que sí conocía el origen del dinero, pero que nunca vio que su jefe trabajara en informes para el Barcelona ni ella remitió ningún documento al club, más allá de las facturas.

C.D. considera que el único motivo por el que el Barcelona dejó de pagar a Negreira es que “dejó de ser vicepresidente” del Comité Técnico de Árbitros. Y también desvela que cuando eso ocurrió Negreira llamó delante de ella a Bartomeu, pero este “nunca contestó a las llamadas”.

La Policía pone en duda la declaración de Bartomeu
El País también ha publicado informaciones sobre la declaración de Josep Maria Bartomeu, el único de los presidentes que han hablado, a la Fiscalía. “Lo conocía por haber sido árbitro de fútbol y haber coincidido en la Federación Española de Fútbol. Lo conocía por la prensa, no por tener relación con él personalmente”, aseguró el exmandatario blaugrana a la Policía.

En su informe, la Policía escribe que “sus afirmaciones no se sostienen” porque la relación con Negreira fue explicada por el exvicepresidente del CTA y también confirmada por la propia secretaria de Negreira.

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