En los 307 días que lleva en funcionamiento el único hospital de Europa monográfico en coronavirus en este centro han sido atendidos 8.000 pacientes y se ha vacunado a 1.600.000 personas. Y entre tanto, han ocurrido otras muchas cosas: una petición de mano por WhatsApp que acabó en boda telemática entre Fernando y Rosario, ingresos de familias enteras en diferentes pabellones que se encontraban por los pasillos para saber el uno del otro, dos jubilaciones de profesionales, romances entre sanitarios…

Se creó una biblioteca gracias a las donaciones de libros de colegios, de celadores y hasta de la iglesia de un barrio. Una cadena de grandes almacenes también donó juegos para hacer más llevaderos los días de tratamiento en el Zendal y aquí se ha celebrado el Día del Libro. A sus instalaciones acudió el escritor Javier Moro, el autor de Flor de Piel, para regalar ejemplares a los pacientes. Es parte de la corriente de solidaridad, humana y de gratitud que se ha generado en torno al hospital que lleva el nombre de la primera mujer enfermera que se enroló en una misión internacional para llevar a América la vacuna de la viruela, una de las pandemias más letales de la historia.

Pero en un hospital tan versátil como el Enfermera Isabel Zendal, en el que un día se usaba el pabellón 1 para vacunación y al siguiente se adaptaba para hospitalización porque llegaba la quinta ola, otro de sus potenciales más desconocidos es que se ha convertido en centro de alta actividad investigadora sobre el temible virus y las conclusiones de sus trabajos pasarán a formar parte de toda la literatura científica que se está generando en torno al síndrome respiratorio SRAS-CoV-2. Hasta tal punto que se puede considerar el centro de investigación más fiable de Europa y que podría arrojar más luz sobre el manejo de la Covid-19 en situación de vida real, tal y como asegura el doctor Javier Marco, gerente del centro hospitalario.

Entre otras cosas, porque ningún hospital de Europa dispone de una cantidad tan alta de pacientes que hayan sido tratados en un mismo sitio (8.000 en todo este tiempo). Y es que el número de pacientes representa el 80% de todas las personas afectadas por coronavirus que han pasado por un hospital en Madrid y cuenta con el mayor volumen de pacientes de Europa vistos en un solo centro.

Esto sitúa al hospital en una situación privilegiada para sacar conclusiones a nivel epidemiológico, de afectación de la enfermedad por sexos, razas, por sintomatología y respuesta a los tratamientos, entre otros, porque se presta atención a enfermos que han sido tratados todos en las mismas condiciones.

 Así, el Zendal tiene su propia línea investigadora y cuenta ya con doce ensayos en marcha, un número altísimo, según el gerente. Además, participa en otros 13 ensayos multicentro, en los que intervienen otros hospitales. “Todos ellos están en marcha y las primeras conclusiones de algunos podremos conocerlas a finales de año”, augura el doctor Marco.

Para el gerente del Zendal, el de mayor relevancia que se está llevando a cabo, es un ensayo multicéntrico que compara la evolución de los pacientes que rechazaban trasladarse al Zendal durante la pandemia y se quedaban ingresados en sus hospitales de referencia. “Vamos a ver qué mortalidad ha habido entre esos pacientes, necesidad de ingreso en UCI y estancia hospitalaria. Se trata de validad si, con una población idéntica, nuestra labor era mejor o peor que la de esos hospitales. El resultado de este estudio validará si somos un buen hospital”, puntualiza.

 Marco, que comenzó como director médico, asegura que organizó diversas comisiones dentro del centro: de farmacia, mortalidad y un comité científico para estar a la última de todos los avances y tratamientos que se estaban produciendo pero, dado el volumen de pacientes, “teníamos un deber con la comunidad científica y consideré que para muchos de los médicos que teníamos, algunos de 30 años de edad, podría ser muy estimulante participar en ensayos clínicos de estas características, les serviría para su currículum personal y les subiría la moral.

A partir de ahí, iniciamos nuestra propia línea investigadora y participamos en otros estudios externos”. El hospital, de hecho, fue sede del Fist International Meating Covid-19 que inauguró Isabel Díaz Ayuso, además del primer encuentro de alternativas asistenciales a la pandemia.

Paralelamente, la pandemia ha permitido estrechar lazos entre el Zendal y otros hospitales. Su gerente asegura que todos los días contacta con los jefes de servicio de medicina interna de todos los hospitales para enviarles el cuadro de mando del centro hospitalario, porque son los que durante todo este tiempo han derivado médicos al Zendal para atender a pacientes ingresados.

A su vez, las aplicaciones de mensajería móvil se han convertido en el mejor aliado de los jefes de servicios de urgencias de los hospitales de Madrid, que se encuentran permanentemente en contacto por cuestiones como la derivación de pacientes. Y es que Marco asegura que el Enfermera Isabel Zendal “es un servidor de todos los hospitales de Madrid y hemos basado nuestro trabajo en la comunicación”.