El noble y resístete pueblo, nosotros los  sufridores de las clases media y trabajadora y no digamos el proletariado, estafado, nos quejamos amargamente, desengañados, de las olas abrumadoras malas y hasta pésimas noticias que ofrecen los medios de comunicación, acelerador a fondo, un día y otro, sin treguas en los telediarios gafes.

El país vive otro de sus momentos más tensos y complicados desde los golpes del 23-F y el incivil catalán separatista, más aquellos crímenes de ETA, ahora co-gobernando conjuntamente los PRESUPUESTOS GENERALES DEL ESTADO, claves.

Una situación que genera perplejidad potenciando el miedo estratégicamente calculado, inmovilizando a la opinión pública que hace un año aplaudía, no solo por la pandemia culpable total de los graves errores, la crisis, que arguyen los culpables que se atrincheran en una permisividad que domina la calle.

El barco se escora a la deriva pero no es la mar, sino la tripulación y el patrón  los que navegan contra los acantilados.

La coalición  del Gobierno se mantiene porque a los independistas y al populismo con sus comisarios políticos les interesa que el socialismo centenario caiga derrumbado por su debilidad, y caudillismo, y el estado se rompa en nacionalidades a la espalda de la Europa libre y raíz cultural del mundo  civilizado y culto, bajo la atenta mirada del norte de África −el Magreb− a su vez acosado brutalmente por el yijadismo terrorista que así mismo se va infiltrando sigilosamente, disfrazado, sin controles, como el Covid 19 amarillo.

En la universidad y en la Escuela Superior de Periodismo  nos advertían sutilmente que un periódico o medios distintos con solo con buenas noticias cerraría en un año, se intentó en los Estados Unidos.

Sin embargo tampoco se debiera explosionar un sociedad practicando una guerra sicológica de información  desinformando, manipulando y sufragado por el gobierno de turno o los poderes fácticos, especialmente los económicos-financieros e incluso los servicios secretos, locales, regionales, nacionales e internacionales con el objetivo real de destruir para  posteriormente  construir un sistema inhumano.

Ya se ve en España asomando la punta del iceberg bajo el argumento de que la  democracia que tenemos nos permite todo, cuando la libertad sin la verdad nos conduce al conflicto moral y profesional, manipulando a la opinión pública.

Y la lucha feroz de las audiencias, una guerra económica sin   escrúpulos que llegan desde las cloacas privadas y estatales, en la siempre somos perdedores. Basta leer, escuchar o ver cualquier día unas decenas de medios de información  para tener la sensación de que estamos a merced de los mercenarios que se venden, compran y alquilan, salvo excepciones dignas de crédito y fiabilidad, en su mayoría en digitales independientes.

Sin duda, en todas las naciones, pero en unas peor que en otras, dependen del grado de cultura. No cabe duda.

EPÍLOGO.- Ejemplo. No nos han contado la verdad, el nacimiento de virus, se ha utilizado como arma  sicológica, económica, ideológica, social y política. Han inundado los medios españoles que son nuestra pesadilla y en  el Parlamento se han dicho de todo, falsos.

Quién sabe si la señora Ayuso es un submarino, una venganza sibilina o una movida de la derecha económica. Por qué los procedimientos abiertos en nuestra región, contra nueve grandes corruptos, no se cierran. Por qué Puigdemont sigue en libertad para alivio del Gobierno de Pedro Sánchez. La iglesia católica, la cúpula, a escala mundial, se derrumba en medio de una polémica corrosiva.

Poco se sabe sobre las mafias que operan en España cercanas a la política. Nadie quiere saber el potencial de las farmacéuticas. Las feministas políticas es un negocio, como los días del orgullo gay.

Del mundo de las drogas se extiende un silencio sepulcral, intocable. El debate oscuro del MAR MENOR, no nos dicen la  verdad. Y las eléctricas, lo de las facturas es solo una tupida noticia que tapa a fondo la cruda realidad. El caso de la ministra de Defensa, y sus cuentas corrientes, por  qué se opaca  y silencia. Y en fin por qué NINGUN MEDIO DE INFORMACION ESPAÑOL ha cerrado en plena crisis monumental,¿ cómo se mantienen?

Y última hora, en la noche del pasado miércoles TVE en su telediario emitía un extenso reportaje de 20 minutos, insólito, explicando a su manera porque han subido los precios en España, claro la pandemia global. Pero ignoraba que la mayoría de los productos de alimentación básica son españoles.

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Sureste Press