A las empresas especialmente a las pymes  se les está confundiendo con el mensaje de que la digitalización es lo mismo que la trasformación digital, y no es así. Decir esto es una barbaridad y un mito con graves consecuencias a largo plazo para las empresas.

 Los datos de las empresas murcianas y españolas en su correcta adaptación a la economía digital son preocupantes. Esto en parte es debido a que el 93% de las pymes con web no las tienen adaptadas a los criterios de búsqueda de sus clientes y sobre todo al mito de que tener una web, un ecommerce o redes sociales ya es suficiente y ya es trasformación digital, y desde luego no lo es. Si lo fuera, nuestras empresas estarían bien posicionadas y facturando grandes cantidades, la evidencia es que no es así.

 Por otro lado, nuestras pymes tienen una gran oportunidad de mejora, siempre y cuando comprenda la diferencia entre Digitalización y Trasformación Digital. Entender esta diferencia es crucial para no perder una década y así no despertarnos dentro de un tiempo para averiguar que muchas de nuestras empresas han desaparecido y las que han sobrevivido en el mejor de los casos siguen en el mismo sitio.

 El empresario debe de entender que cuando le hablan de digitalización es tan solo incorporar herramientas digitales a su empresa, pero esto aunque necesario no es suficiente y mucho menos lo más importante. La clave del éxito está en la trasformación digital del negocio. Es decir, adaptar el modelo de negocio, su estrategia y los productos y servicios para que el consumidor en línea perciba un valor añadido. Es entonces cuando podemos decir que una empresa se ha trasformado digitalmente.

 “La trasformación digital es lo que la empresa hace y que el consumidor percibe, la digitalización y la publicidad online son tan solo el medio para hacer llegar el valor del producto o servicio al cliente”.

 Según estudios de consultores británicos, España está en una posición excelente para incorporar a sus empresas a la economía digital, siempre y cuando la pyme murciana y española aborde a la par la cuestión de cuál va a ser su modelo de negocio digital o hibrido y después abordar la inversión en webs, ecommerce, aplicaciones para móviles, redes sociales y en general toda la publicidad en Internet. Invertir en estas herramientas digitales tiene poco sentido si no se va  adaptado el modelo de negocio de la empresa con estrategias de valor percibido para el cliente, y esto sí es trasformar la empresa. La paradoja es que de alguna manera los empresarios lo intuyen, pero necesitan orientación.

 Puedes tener un concepto de negocio erróneo pero con la mejor tecnología que el fracaso es seguro. O puedes tener un buen concepto de negocio con tecnología mediocre que el éxito es muy probable.

 Pensar que la simple digitalización va a llevar muy lejos a las pymes murcianas es un mito. Es como pretender que una empresa por tener buenos ordenadores y un buen software ya significa que se tiene un modelo de negocio con posibilidades de éxito. De la misma manera pretender que por el hecho de tener un ecommerce, o una web, una app, estar en redes sociales o invertir mucho dinero en publicidad online nos llevará al éxito, es un grave error. Hacerse un hueco en la economía digital no funciona así.

 Por otro lado, si las pymes murcianas entienden bien qué es realmente la trasformación digital y la implantan correctamente en sus empresas, podrán llegar a convertirse en empresas más grandes, más rentables y más internacionales, con el consiguiente beneficio para toda nuestra sociedad. Si no lo hacemos bien, la alternativa no será muy buena.

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