Arnaldo Otegi, líder de EH Bildu, uno de los principales socios parlamentarios del Gobierno, nunca ha hablado con el presidente porque terminaría por perjudicar al propio Pedro Sánchez. La declaración, realizada por el coordinador general de la coalición soberanista durante un foro celebrado este lunes en Bilbao, es una nueva demostración de cómo la relación entre los socialistas y la izquierda abertzale supone un desgaste para el PSOE que es reconocido hasta por sus propios aliados.

Otegi ha intervenido en el Forum Europa con el objetivo de desbrozar su propuesta para implantar un «modelo de empresa vasco», una cuestión que forma parte de su giro estratégico para ganar centralidad. «Hay muchos empresarios que abrazan las tesis de EH Bildu», ha asegurado.

El documento 'Bases para una política industrial emprendedora' se presentará en un acto que se prevé celebrar a finales de este mes, pero parte de cuatro ejes fundamentales: definir en qué áreas tiene que participar el sector público, diseñar un marco de relaciones laborales, potenciar un esquema de empresas en el que se favorezca el «arraigo» y apostar por el reparto de trabajo y las 32 horas semanales, una cuestión en la que incidió la semana pasada la vicelehendakari, Idoia Mendia, y que Otegi considera «un debate interesante».

La propuesta de EH Bildu forma parte del giro de timón diseñado por la coalición soberanista, en el que también se incluyen los pactos educativos o su nueva política energética. Pero en el caso del empresariado tiene un carácter más simbólico por los atentados cometidos por ETA contra los propios industriales y el chantaje a través del 'impuesto revolucionario' que sufrieron muchos de ellos.

Pero a pesar de todo eso, Otegi, que ha defendido la necesidad de que la industria gane peso, ha considerado que el mundo de la empresa «no es ajeno» a su formación porque «hay muchos empresarios que comparten y abrazan las tesis progresistas de EH Bildu». «Las empresas son el espacio de generación de riqueza en este país», ha añadido.

Durante su intervención, el principal referente de la izquierda abertzale también se ha referido a otras cuestiones. Por ejemplo, la estrategia de «pactos de Estado» que desarrolla EH Bildu en los últimos años y donde se engloban los acuerdos que viene firmando la izquierda abertzale en la última legislatura con Sánchez.

Una relación, unida a la que mantiene con ERC, que los propios socialistas admiten que les supone un importante desgaste en algunas autonomías y que aleja a parte de sus potenciales votantes. De hecho, Otegi ha reconocido que a pesar de que su formación es uno de los aliados más fiables del Gobierno «nunca he hablado con Sánchez porque no le favorecería hablar conmigo».

«Sí lo hago con Pablo Iglesias y lo hice con Zapatero», ha reconocido. Con el exlíder de Podemos y exvicepresidente del Gobierno la relación siempre ha sido fluida. Con el expresidente del Ejecutivo se reunió en septiembre de 2018 en el caserío Txillarre de Elgoibar.

Otegi también se ha mostrado convencido de que el «debate nacional» va a estar sobre la mesa esta legislatura y la siguiente. El pasado viernes, EH Bildu ha presentado una iniciativa en el Parlamento para obligar al PNV a retratarse con una proposición no de ley en la que pide que se reactive el debate sobre el nuevo estatus.

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