La llegada de migrantes a España de forma irregular a través de las costas de la Península y Baleares han registrado en lo que va de 2023 un aumento del 48,4% con respecto a las cifras que el Ministerio del Interior manejaba en estas fechas del año pasado.

 Según los datos hechos públicos este lunes por el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska, entre el 1 de enero y el 15 de abril de este año se han contabilizado 2.516 entradas, es decir, 821 más que las 1.695 registradas un año antes.

Estos datos determinan una subida, también, del número de pateras arribadas a las costas peninsulares y del archipiélago balear, que pasan de las 167 de los primero tres meses y medio de 2022, a las 213 que han llegado en lo que va de este año.

Se trata de la segunda quincena consecutiva en la que aumenta esta cifra. Se trata de la excepción en unos datos sobre entradas de migrantes en el país que mantienen la tendencia a la baja que ya se venía registrando desde finales del año pasado.

Así, entre el 1 de enero y el 15 de abril de 2021 han entrado en el país de forma irregular un total de 5.208 migrantes, un 44% menos que en el mismo periodo de 2022 (9.302), debido a la caída de las llegadas de forma irregular por mar (4.940 en lo que va de este año) en un 39,2% con respecto al mismo periodo del año anterior (cuando se contabilizaron 8.130 entradas) y en un 77% las entradas por la frontera terrestre (268 en 2023, frente a las 1.172 en el mismo periodo de 2022).

Interior detalla que, en Canarias la caída es de un 62,6% entre las llegadas contabilizadas en los que va de 2023 (2.376) y las que se registraron en el mismo periodo del año anterior (6.359); mientras que en Ceuta suponen un descenso del 51,5%. Las entradas por la costa de esta ciudad autónoma sumaban a 15 de abril de 2022 un total de 33, mientras que en 2023 ha contabilizado 16.

Las costas de Melilla, por su parte, han registrado 32 entradas en este año, un 25,6% más que las 43 que se habían contabilizado hasta el 15 de abril de 2022.

 En cuanto a las fronteras terrestres, los datos de Interior determinan que la valla de Ceuta se mantiene a la baja, después de registrar en la quincena anterior sus primeras cifras inferiores a las contabilizadas en 2022.

 Así, por segunda vez consecutiva en lo que va de año, la ciudad autónoma registra un descenso de un 1,2% en este tema. 243 son los migrantes que han cruzado la valla en Ceuta en 2023, frente a los 240 que lo habían hecho en el mismo periodo de 2022.

En Melilla, por su parte, la diferencia entre este y el año pasado es de un 97% menos: en lo que va de 2023 se han contabilizado 28 entradas de forma irregular en el país por esta vía, mientras que hasta el 15 de abril de 2022 se habían producido 929.

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