Tal como había adelantado un funcionario vinculado con la investigación, el Servicio Secreto de Estados Unidos cerró la investigación sobre el hallazgo de una bolsa con cocaína en la Casa Blanca por no haber logrado identificar al dueño de la droga, decepcionando a la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, quien había dicho días antes que depositaba toda su confianza en el Servicio Secreto, ya que seguramente “llegarán al fondo de este episodio”. No fue así.

Si bien la portavoz del presidente había sugerido en una rueda de prensa que la droga podía pertenecer a un visitante, ya que fue encontrada en una “zona muy transitada” por donde “pasan los visitantes hacia el ala oeste”, luego hubo contradicciones.

“Incluso si hubiera cámaras de vigilancia, es posible que no haya sido captado”, dijo una fuente anónima de la Casa Blanca que declaró a Politico, refiriéndose al responsable de haber ingresado un bolsa con cocaína que fue encontrada el pasado 2 de julio por el cuerpo policial encargado de la seguridad del mandatario.

El Servicio Secreto ha estado revisando los registros de los visitantes y las cámaras de seguridad del ala oeste de la Casa Blanca, pero no ha podido identificar a un sospechoso, dijo este jueves una fuente a la cadena CNN.

El regreso a la versión inicial
Ahora vuelven a la versión inicial. Otra fuente citada por el medio indicó que la hipótesis principal sigue siendo que la bolsa la dejó un visitante en el área de acceso del edificio, donde tienen que pasar un filtro de seguridad y depositar los teléfonos en unos cubículos.

 Sin embargo, algunos medios vincularon el particular hallazgo con Hunter Biden, hijo del presidente demócrata, por su expediente de adicción a las drogas revelado en fotografías contenidas en la computadora que abandonó en un centro técnico de Delaware. No hay pruebas de esos señalamientos aunque sí muchos memes en Twitter. En paralelo, hay otros que afirman que “muchos de los altos funcionarios de Joe Biden” estarían consumiendo regularmente la droga.

Jean-Pierre respondió en una rueda de prensa a un periodista que “es totalmente irresponsable” sugerir que la cocaína encontrada en la Casa Blanca pertenecía a la familia Biden, ya que se encontraban fuera de la residencia presidencial el fin de semana del hallazgo.

¿Y la investigación en el Congreso?
Por su parte, los republicanos en el Congreso abrieron una investigación la semana pasada. Así lo anunció el representante y presidente del Comité de Supervisión de la Cámara baja, James Comer, quien envió una carta al Servicio Secreto para solicitar una “sesión informativa”. “La presencia de drogas ilegales en la Casa Blanca es inaceptable y un momento vergonzoso en su historia”, escribió en Twitter.

Para remarcar las exigencias, un veterano de esa instancia, encargada de investigaciones criminales y de proteger a los políticos estadounidenses, aseguró que “hay absolutamente CERO posibilidades de que alguien, que no sea un miembro de la familia, haya traído esa cocaína al complejo de la Casa Blanca”, afirmó Dan Bongino.

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