Todo queda en casa!

El tiempo que Iván Redondo permaneció como jefe de gabinete de Pedro Sánchez fue no solo provechoso para el asesor áulico, sino también para su mujer.

Según informa este 8 de septiembre de 2021 El Cierre Digital de Juan Luis Galiacho, la esposa del gurú sanchista se puso las botas facturando a empresas subvencionadas por el Gobierno socialcomunista.

Cuenta la información firmada por Francisco Mercado que Redondo y Asociados Comunicación (R&A Comunicación) recibió en el año 2021 cerca de 19.000 euros procedentes de Confederación de Sociedades Científicas de España.

Curiosamente, esta empresa recibió una subvención de 50.000 euros por parte del Ministerio de Ciencia en la etapa en la que Pedro Duque era aún el titular de esa cartera.

Abunda la noticia en que en el ejercicio de 2019 la empresa familiar de Iván Redondo facturó, con tres empleados fijos y dos eventuales, 269.554 euros frente a los 249.561 euros de 2018, la mitad bajo mandato ya en La Moncloa.

Curiosamente, mientras Sánchez estuvo alejado de La Moncloa y, por tanto, Redondo tampoco tenía cuota de poder, su empresa facturó en 2017 un total de 190.000 euros.

No obstante, que en ese año ya estuviese fichado por el secretario general del PSOE fue más productivo para su cuenta de resultados. En el curso 2016 la cifra facturado por R&A Comunicación apenas llegó a las seis cifra, 95.726 euros para ser exactos.

La permanencia de Iván Redondo en los núcleos de poder de La Moncloa fue todo un espaldarazo para su empresa familiar.

Tanto es así que la mayor factura se la cobra al Ejecutivo socialcomunista con esos cerca de 19.000 euros. La Fundación Areces llegó, a duras penas, a los 5.000 euros y La Caixa a un monto total de 25.000 euros.

OPACIDAD Y SOSPECHAS
Llama la atención que la página web de R&A Comunicación haya optado por no publicitar quiénes fueron sus clientes durante el tiempo en el que Iván Redondo estuvo en La Moncloa.

Fue su mujer, Sandra Rudy, la que estuvo como máxima responsable durante el tiempo en que Redondo tenía que sacar constantemente conejos de la chistera para vender a los españoles las ‘bondades’ de su cliente.

Ella misma se define así:

Es socia-fundadora y CEO de la firma R&A Comunicación (antes Redondo & Asociados), referente en el sector de la consultoría política y asuntos públicos. Rudy es experta en comunicación estratégica y corporativa. Ha definido y desarrollado con éxito programas de comunicación para clientes de distintos ámbitos como el sanitario, alimentación e inmobiliario.

En el ámbito de la consultoría política ha liderado los equipos de la firma que han participado en las citas electorales de los últimos diez años y en asuntos públicos ha asesorado a empresas del ámbito del juego online, organizaciones del tercer sector y tabaqueras, entre otras.
De hecho, no son pocas las sombras de sospecha sobre posibles conflictos de intereses.

Trabajar en las más importantes operaciones legislativas y asesorar a tabaqueras y empresas del juego parece definir una labor de lobby cuyo peso aumenta el hecho de que el marido de la dueña de la empresa haya sido el máximo guía político del presidente del Gobierno, por encima de cualquier cargo del Gobierno.

Y si a esto se añade la absoluta opacidad sobre sus clientes es prácticamente imposible atisbar si hubo conflictos de intereses entre la labor de ambos cónyuges.

Baste como botón de muestra que Alfredo Franco, exconsultor de R&A fue trasvasado al Gobierno cuando llevaba el asesoramiento de General Electric Healthcare, a quien el Ejecutivo compró el 29 de marzo de 2021 dos equipos móviles de fluoroscopia para Ceuta por valor de 98.000 euros.

También asesoraba a GE Energy, que en el pasado ha recibido contratos de Defensa y Adif. Y destaca su labor en pro de Monsanto, firma que distribuye pesticidas que han sido denunciados por cancerígenos y las polémicas semillas transgénicas.

CRITICAS A AYUSO DESDE LA CONSULTORA
Otro detalle polémico ha sido el de descubrir como empleados de la consultora de Iván Redondo procedían a poner en tela de juicio la gestión de Isabel Díaz Ayuso.

Especialmente llamó la atención como desde esta empresa se fue allanando el camino para que Pedro Sánchez acabase por arremeter contra la presidenta de la Comunidad de Madrid a cuenta del Hospital Enfermera Isabel Zendal.

 De hecho, Sánchez acabó poniendo en tela de juicio el papel sanitario de la mandataria madrileña en un encuentro con la prensa sin cámaras, pero que no fue óbice para que al final no salieran a la luz pública sus palabras.