El Juzgado de Instrucción número 2 de Zaragoza acaba de dar por concluidas las pesquisas contra Sandra María P. H., la joven detenida a finales del pasado año por preparar una emboscada a su exnovio, al que citó en un céntrico hotel haciéndose pasar por otra mujer. El hombre reservó una habitación, pero sus planes no salieron como tenía previsto. Es más, la cama en la que terminó durmiendo aquella noche fue la de un hospital, ya que recibió una brutal paliza de la que tardó casi un mes en recuperarse.

Por estos hechos, ocurridos el 6 de noviembre de 2021 en el Hotel Don Yo de Zaragoza, fueron arrestados tanto la encausada, de 30 años, como Estiben V. G., el matón con el que se presentó al filo de la medianoche en el establecimiento. La acusación particular, de la que se encarga la abogada Noemí González, acaba de solicitar para ambos sendas penas de 4 años de prisión, ya que no solo les acusa de las graves lesiones que sufrió la víctima, sino también de un delito de allanamiento de morada.

La Fiscalía, que llegó a pedir    prisión provisional para ambos arrestados, todavía no ha remitido su escrito de calificación a la jueza, por lo que habrá que esperar para conocer cuál es el castigo que solicita. Las defensas, que corren a cargo de las letradas Claudia    Melguizo y María Elena Sanz, evitaron en su día que los investigados acabaran en el centro penitenciario de Zuera. Y lo mismo intentarán hacer en el juicio, para el que todavía no hay fecha.

Destrozaron la habitación
Como explica la juez instructora en su último auto, la encausada acudió al hotel movida por el «resentimiento» y «con el ánimo de menoscabar la integridad física» de su exnovio, con el que había mantenido una relación sentimental de «corta duración». Como revelaría después de la víctima, él había quedado en la habitación 907 del establecimiento con una chica con la que había estado mensajeándose a través de    Instagram. Lo que ignoraba es que esa persona era la acusada, quien se había abierto un perfil falso en dicha red social para poder contactar con él y tenderle una trampa.

Cuando el joven abrió la puerta y vio a su exnovia acompañada del matón su sorpresa fue mayúscula. Pero apenas le dio tiempo a reaccionar, porque parece que le pusieron un cuchillo en el cuello y le obligaron a meterse en el cuarto.

Una vez dentro, le propinaron una tremenda paliza. Y aunque la víctima logró refugiarse en el baño, no le sirvió de mucho, porque Estiben V. G. echó abajo la puerta y continuó agrediéndole. Según la Policía, el colombiano llegó a desencajar el pie del lavabo para golpear a la víctima con él. Los gritos de auxilio pusieron en alerta al personal del hotel, que    acudió a socorrer al herido y se encontró con la habitación destrozada. Los acusados habían huido, pero fueron localizados días después.

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