Para mencionar, prácticamente, cualquier cosa relacionada con Rusia, es necesario utilizar el grado superlativo en el lenguaje, incluso cuando se quiere definir las cualidades de resignación, sacrificio, supervivencia, perseverancia, ilusión por la vida, y amor a su tierra, que pueden ser igualables por otros grupos de personas humanas, pero nunca superar al pueblo o a la gente rusa. 

Fruto de esa formidable condición o condicionante de amor y respeto por la tierra en la que viven, la gente rusa, entendiendo como gente rusa a los pueblos de origen étnico eslavo, han sido los únicos en el planeta tierra que, formando una identidad de pueblo común, han estado asentados en tres continentes del planeta que habitamos llamado tierra: Europa, Asia, y América; y, en todos ellos, excepto en América, donde solamente ocuparon el actual territorio de Alaska, desistieron de extenderse hacia el sur por motivos internos propios de ellos mismos, aunque la propaganda y la publicidad engañosa, siguiendo su trabajo demoledor que ya dura siglos, diga o publicite lo que le venga en gana, porque si existe un grupo humano sobre el que está recayendo continuamente desde otro grupo, con un grado de humanidad ínfimo o nulo, una sin cesar publicidad engañosa, es sobre los rusos, por parte del capitalismo judeo-cristiano-católico principalmente. 

Y el símbolo más gráfico, más representativo de la calidad de unas gentes, de un pueblo: el pueblo aglutinador ruso, es un gesto espontáneo, natural, que brota o surge de un modo imperativo desde el interior de cualquier hombre que ame la libertad, caso de los rusos,  es el levantar el brazo, lo mismo el izquierdo que el derecho, pero siempre con la mano cerrada presentando el puño, como un signo universal de libertad y dignidad personal contra la injusticia. 

Y cuando una persona quiere decir que algo es verdadero, que es genuino, el énfasis que tiene más crédito para acrecentar la verdad de su exposición, es decir, aquello de “son verdades como puños”; proveniente todo de ese gesto universal de levantar el brazo, con la mano cerrada presentando el puño. 

El origen del puño en alto, no se le puede atribuir en exclusiva  a ningún grupo social humano de ningún lugar determinado; pero si es un gesto espontáneo del hombre que quiere ser y se siente libre, contra todo aquel que le quiere privar de su libertad. Y, la libertad, como es algo que no le gusta ni a las religiones ni a los denominados como gente poderosa, en sus egos elegidos por dios, el puño alzado  es un gesto anti ellos, antifascista, porque tanto las religiones como los llamados poderosos son gentes fascistas.  

Allí y donde haya un tirano, un genocida, siempre habrá a su lado un clérigo, un chamán, un religioso. Y, por el contrario, allí y donde haya un hombre que quiera ser y luche por ser libre, habrá un hombre con el brazo levantado y el puño cerrado.  

Rusia siempre ha estado y está en el punto de mira para destruirla de los numerosos cañones de la organización religiosa más poderosa económicamente del planeta: el clero católico que tiene su sede en un estado independiente, nada solidario ni cooperativo con los demás estados de su entorno europeo ni mundial, denominado estado Ciudad del Vaticano. 

El citado estado Ciudad del Vaticano, surgido territorialmente como agradecimiento del fascismo mundial, que, en su día lo encabezó Alemania e Italia, vive y existe unido, en una unión subliminal con el ejército mercenario, también de los más poderosos del planeta: los EE.UU; y ambos en amasijo, clero católico romano y ejército mercenario Usa, entienden que todos los minutos y los segundos de cualquier día y circunstancia, consideran que son buenos e idóneos para intentar desacreditar a uno de los pueblos, de las gentes, que gozan de un modo innato de gran calidad para la solidaridad colectiva, las ciencias y las artes: los eslavos; los rusos. 

Que por su voluntad popular, y pese e indiferentes a los continuados ataques de los dos citados poderes amasado religión y negocio; y dinero tras armas de fuego y destrucción: Vaticano y Usa, que no descansan ni de día ni de noche de desestabilizar todo lo que no les permita acrecentar sus bienes, hasta el momento, y pese a su constante juego sucio, los rusos, Rusia, los Países del Río Volga, de los montes Urales y de Siberia, constituyen una República Semiparlamentaria, por una clara y decidida voluntad popular de sus gentes. 

Rusia, los rusos, como pueblo y gente que aman a su tierra, tienen un historia y una cronología de estancia sobre aquellas inmensidades terrenales que son los frutos de sus amores, que se pierden en el concepto que se suele decir de la “noche de los tiempos”, y en la mitología histórica de sus orígenes se acepta como posible que un pueblo estepario de origen turco, los Jázaros, en la citada noche de los tiempos, habían esclavizado abundantemente a los pueblos orientales a los Montes Urales: gentes denominados Eslavos; y, posteriormente, por acción guerrera de los Rus (Remeros) de Kiev, fueron puestos en libertad, dejando de ser esclavos. 

Los Rus de Kiev, gentes que se denominan eslavos, fueron y son en extremo amantes de vivir ayudándose; solidarios entre sí, gregarios, para mejor sobrellevar los inconvenientes que les puede presentar la propia naturaleza; y de ahí de ese principio asociativo que adorna y es una cualidad del pueblo o la gente eslava, junto con su amor por las artes, las cosas bien hechas y la ciencia, los citados eslavos; las tribus eslavas, se constituyeron en el origen como Federación de Tribus Eslavas Orientales, corriendo años del siglo IX, y así tuvo nacimiento el denominado Rus de Kiev. 

La Federación o Unión de Tribus Eslavas Orientales, el denominado como Rus de Kiev, estuvo política y geográficamente funcionando desde el siglo IX que se considera que se consolidó la citada unión de tribus, hasta entrado el siglo XIII, que imperativos sociales políticos del momento, que alteraron las agrupaciones humanas, produjeron la desintegración social en el denominado Rus de Kiev en el citado siglo XIII. Y desde el más moderno, socialmente hablando, Principado de  Moscú, surgió la nueva fuerza social reunificadora de las gentes eslavas, que se volvieron a unificar bajo el citado Principado de Moscú....

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