El gobierno de Nueva Zelanda es el primero en reconocer que usa ese mecanismo

Este jueves 1 de diciembre, el gobierno de Nueva Zelanda respondió a una solicitud de información remitida por Mark Wong en la que se le planteaba lo siguiente: "¿El gobierno, cualquier división del gobierno, cualquier miembro del gobierno o cualquier organización que actúe en nombre del gobierno, ha tenido alguna vez acceso de socios al portal de eliminación de Facebook?"

En su respuesta, el gobierno de Jacinda Ardern (miembro del Partido Laborista de Nueva Zelanda, que es parte de la Alianza Progresista, que agrupa a partidos socialistas y de izquierdas de varios países) ha afirmado lo siguiente: "Sí, el Departamento de Asuntos Internos tiene acceso al portal de eliminación de Facebook. Por favor, tenga en cuenta que no podemos informar si alguna otra agencia gubernamental tiene acceso al portal de eliminación". La carta oficial con la respuesta del gobierno neozelandés se puede leer aquí (ver PDF).

 
La carta del gobierno de Nueva Zelanda reconociendo oficialmente que tiene acceso al portal de censura de Facebook (Fuente: FYI.org.nz).

El gobierno de Nueva Zelanda es el primer que reconoce oficialmente tener acceso a ese portal de censura. El acceso a ese portal se puede ver aquí (hay una copia en archive.ph, por si de repente lo cambian). En el portal lleva este título: "Solicitar acceso seguro al sistema de solicitudes de contenido de Facebook". Debajo, un texto indica lo siguiente: "Este portal es para solicitudes de socios incorporados relacionadas con problemas de contenido en Facebook e Instagram. Si es un socio incorporado, envíe su solicitud a través de este portal".

 
El acceso al portal de censura de Facebook (Fuente: Facebook).
Un portal de censura cuya existencia fue revelada por un medio de EEUU en octubre

La existencia de ese portal fue revelada por el diario estadounidense The Intercept el 31 de octubre, en una noticia en la que señaló que el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) "está ampliando silenciosamente sus esfuerzos para frenar el discurso que considera peligroso". La noticia añadía: "Años de memorandos, correos electrónicos y documentos internos del DHS, obtenidos a través de filtraciones y una demanda en curso, así como documentos públicos, ilustran un esfuerzo expansivo de la agencia para influir en las plataformas tecnológicas".

La tentadora posibilidad de imponer una censura extrajudicial con fines políticos

La excusa de combatir la "desinformación" ofrece a los gobiernos tentadoras posibilidades de limitar la libertad de expresión sin pasar por la Justicia: "No se ha articulado claramente cómo el gobierno define la desinformación, y la naturaleza inherentemente subjetiva de lo que constituye la desinformación brinda una amplia oportunidad para que los funcionarios del DHS tomen determinaciones políticamente motivadas sobre lo que constituye un discurso peligroso", señalaba The Intercept en la citada noticia.

Este medio recuerda que "el loable objetivo de proteger a los estadounidenses del peligro a menudo se ha utilizado para ocultar maniobras políticas. En 2004, por ejemplo, los funcionarios del DHS afrontaron la presión de la administración de George W. Bush para aumentar el nivel de amenaza nacional del terrorismo, en un intento por influir en los votantes antes de las elecciones, según el exsecretario del DHS, Tom Ridge. Los funcionarios estadounidenses han mentido habitualmente sobre una variedad de temas, desde las causas de sus guerras en Vietnam e Irak hasta su ofuscación más reciente sobre el papel de los Institutos Nacionales de Salud en la financiación de la investigación del coronavirus del Instituto de Virología de Wuhan".

El documento de Facebook explicando a los gobiernos cómo usar esa herramienta

The Intercept también dio a conocer un documento confidencial (ver PDF) en el que Facebook explica a los gobiernos cómo utilizar ese portal de censura. El escándalo por el uso de estos mecanismos extrajudiciales para limitar la libertad de expresión y la libertad de información fue de tan envergadura que la Casa Blanca se vio obligada hace un mes a negar que esté usando ese portal de censura, algo que resulta difícilmente creíble.

Según ha recordado el New York Post, la anterior secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, reconoció en julio que la administración Biden ha etiquetado publicaciones en Facebook como "desinformación", para lo cual la Casa Blanca estaría en contacto con las grandes empresas tecnológicas. La opacidad de esa censura y el hecho de que no pase por la Justicia -como es preceptivo en una democracia en cualquier procedimiento que afecte a ese derecho fundamental- anima a desconfiar de que esa herramienta no se esté utilizando también con fines políticos. Recordemos, por ejemplo, lo ocurrido hace dos años cuando Twitter y Facebook censuraron una noticia del New York Post que afectaba gravemente a Joe Biden en plena campaña para las elecciones presidenciales de Estados Unidos.

El silencio de los medios españoles sobre este escándalo

Lo más pasmoso de este escándalo el silencio mediático sobre estos hechos en España. La información difundida el 31 de octubre por The Intercept y la carta publicada ayer por el gobierno de Nueva Zelanda no han sido reflejados en ninguna noticia por los principales medios de comunicación. Cabe preguntarse si a los dueños de esos medios y a los periodistas que trabajan en ellos ha dejado de parecerles importantes la libertad de expresión y la libertad de información, así como la protección judicial de esos derechos frente a cualquier intento de censura por parte del poder político.

 Evite la censura de Internet suscribiéndose directamente a nuestro canal de Telegram, Newsletter

Haz tu Donación

Síguenos en Telegram: https://t.me/impactoespananoticias

Twitter: https://twitter.com/impactoSumustv

Instagram: https://www.instagram.com/impactoespana?r=nametag

YOUTUBE: youtube.com/@impactoespananoticias

Whaatsapp: 635967726