El tiempo primaveral más propio de los primeros meses de verano, con temperaturas por encima de lo habitual para la época y tiempo seco salvo en el extremo noroeste peninsular, se va a ver bruscamente interrumpido este fin de semana en gran parte de España. La inestabilidad se extenderá y las temperaturas bajarán el domingo de forma notable con excepción de las zonas del mediterráneo según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

 Un frente activo de origen atlántico está provocando lluvias en el noroeste, abundantes en las provincias occidentales y con posibilidades de extenderse a Asturias, al resto de Comunidades Cantábricas y al noroeste de Castilla y León. El resto de España tendrá cielos despejados, y temperaturas que superaran los 25 grados en puntos tanto del norte como del este y del sur. En Murcia, Sevilla o Zaragoza las máximas oscilarán entre 28 y 30 grados.

 Para el viernes, el frente del día habrá avanzado hasta afectar no solo al Cantábrico, sino a más zonas de Castilla y León y norte de Extremadura. "Las temperaturas bajarán claramente en el extremo norte de la península, en el Cantábrico y Pirineos, mientras que en el resto del país no variarán demasiado o bajarán un poco", apunta Aemet. A orillas del Mediterráneo y Baleares subirán claramente con máximas entre 25 y 30 grados. La situación se mantendría estable durante el sábado.

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Sin embargo, un nuevo frente desde el Atlántico ya comenzará a afectar desde el sábado a Galicia. Con excepción de las zonas afectadas, el día será nuevamente veraniego. "Seguiremos en muchas zonas con temperaturas varios grados por encima de los valores normales de la época del año", adelanta en su previsión José Miguel Viñas, meteorólogo de Meteored.

Sin embargo, la jornada del domingo será "lluviosa, fría y desapacible" en el norte peninsular, y nevará en la Cordillera Cantábrica y los Pirineos por encima de los 1200-1300 metros. Las temperaturas estarán en descenso generalizado salvo en el Mediterráneo, en donde disfrutarán todavía de ambiente soleado, así como en Baleares y gran parte de Canarias. "Será un día ventoso en la mitad norte. Los vientos del oeste y noroeste alcanzarán rachas fuertes el área cantábrica zonas altas de los Pirineos", apunta el especialista.

Las precipitaciones más abundantes se producirán en el litoral vasco, adelanta AEMET, y destacará la abundante nubosidad baja en la meseta Norte y su orla montañosa. "Se esperan nevadas en Pirineos, en cotas que irán bajando de 1700/2000 m hasta unos 1100/1400 m", prosigue la previsión de la agencia meteorológica, y "no se descarta calima en Canarias". Confirman que las temperaturas bajarán en todas partes salvo el Mediterráneo, "con cierzo en el Ebro y poniente en Alborán". 

Esta caída de temperaturas se mantendría con el comienzo de la siguiente semana y las lluvias podrían extenderse moderadamente a otras zonas de la mitad norte y Baleares. Sin embargo, el ambiente soleado y cálido regresaría en los siguientes días, agravando la situación de sequía meteorológica que atraviesa España desde el pasado invierno. 

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