Pedro Sánchez tiene sobrados motivos para estar preocupado. El PSOE no da señales de reactivación, su tendencia electoral es al “electroencefalograma plano” y apenas consigue sumar un escaño tras la amplia remodelación del Gobierno emprendida por el presidente. Es decir, no hay ni asomo de remontada. Toda la profunda crisis de Gobierno emprendida por el presidente -la remodelación más importante de la coalición desde su investidura en enero de 2020- apenas ha sido tenida en cuenta por el electorado.

 Si las elecciones se celebrasen ahora, los socialistas perderían hasta 23 diputados con respecto a los resultados del 10 de noviembre de 2019, quedándose con 97. Así lo constata la encuesta de Data 10 para okdiario en la que se comprueba que el PP consolida su ascenso consiguiendo junto a Vox una holgada mayoría absoluta.

 Los populares serían nuevamente el partido más votado con un 30,3% de los votos, con los que obtendrían 133 escaños, que sumando los 49 de VOX lograría una mayoría absoluta de 182 escaños. El PSOE se desploma hasta el 24,5%, con lo que se quedaría en 97 escaños.

El PP es el partido con una mayor fidelidad de voto respecto a las anteriores elecciones generales. Hasta el 85% de su electorado les volvería a apoyar. Los populares se consolidan como referencia del centroderecha y aglutinan al votante de Ciudadanos. La sangría ‘naranja’ es un hecho: sólo retiene al 37% de sus apoyos. Casi tantos, hasta el 34%, apuestan esta vez por el PP.

 Desde Moncloa esperaban que la crisis de Gobierno -que Sánchez negó una y otra vez que acometería- activara a un PSOE en caída libre tras el fiasco de la moción de Murcia y el batacazo en las elecciones del 4-M ante Isabel Díaz Ayuso y acabar adelantado por Más Madrid.

El PSOE, a perro flaco….
Es más, los indultos a los golpistas llevaron al PSOE a un desplome de 24 escaños según la encuesta que publicaba okdiario hace dos semanas. Estaba claro que la legislatura de Sánchez daba señales de agotamiento. Con la remodelación de Gobierno, Sánchez buscó darle musculatura al PSOE desde el Gobierno para frenar el avance del PP de Pablo Casado.

Los cambios acometidos por Sánchez -perfiles «de refresco» para reactivar el partido con sus guiños a Ferraz al prescindir de Redondo y apostar por «hombres de partido»- no han tenido los efectos esperados. Los resultados del PSOE que arroja la encuesta de Data10 son decepcionantes, y dan la razón a Casado cuando afirmó que «cuando cambias a siete ministros, a tu núcleo duro, a quienes te hicieron presidente, eso lo hace quien sabe que va muy mal».

Y a perro flaco todo son pulgas. Porque ese escaño que gana el PSOE lo pierde su socio de coalición, Unidas Podemos, que se queda en 17 escaños. La formación morada tampoco acusa la elección de Ione Belarra como nueva secretaria general ni la renovación de sus altos cargos ejecutivos. Podemos también sigue perdiendo músculo tras la salida de Pablo Iglesias de la primera línea política y no parece que Belarra, Irene Montero y Lilith Verstrynge vayan a darle un vuelco a las encuestas.

El tercer partido en el Congreso sería Vox, que tendría un 15,4% del voto y 49 escaños, es decir, cinco escaños por debajo de sus resultados en noviembre de 2019 pero sin perder demasiado terreno con el PP. La encuesta de Data 10 es lapidaria para Cs, que se queda con un único escaño, lo mismo que Teruel Existe.