La española Adriana Cerezo se ha clasificado para semifinales a lo grande en el taekwondo de los Juegos Olímpicos de Tokio, mientras que Adrián Vicente ha caído en cuartos de final y queda a la espera de una posible repesca.

Cerezo, de tan solo 17 años, protagonizó una actuación memorable para destrozar a la china Jingyu Wu (33-2), doble campeona olímpica en Pekín 2008 y Londres 2012. De pasó vengo a su gran referente, Brigitte Yagüe, que perdió precisamente contra la asiática en la final olímpica de hace nueve años.

Con una superioridad insultante, Cerezo se apuntó un 9-0 favorable en el primer asalto con dos patadas en la cabeza, una al cuerpo y un puñetazo. Sin embargo, fue en el segundo donde exhibió toda su calidad ante una rival completamente desarbolada que encajó un parcial de 24-2, incluidas cinco patadas a la cabeza y otra más con giro incluido.

El marcador reflejaba un 33-2 antes del tercer asalto y, debido a la diferencia superior a 20 puntos, la eliminatoria finalizó sin ni siquiera disputar el último parcial. La madrileña disputará las semifinales a las 9.30 hora española y una victoria le aseguraría la medalla en su debut olímpico.

Por su parte, Vicente cayó con honor frente al número uno mundial, el coreano Jun Jang (24-19), en un combate que dominaba al final del primer asalto (5-6). Con mucho sufrimiento, el asiático dominó el segundo (10-6) y el tercer asalto (9-7) y selló el pase a semifinales. Si Jang llega a la final, el madrileño se meterá en la repesca y al menos seguirá aspirando al bronce.