Entre las innumerables muestras de recrearse en el dolo (léase, engaño, fraude, simulación, estafa o trampa) que Sánchez y colaboradores practican sin reparo, podría encuadrarse la pregunta del ministro de Exteriores, JM Albares: “¿Qué les pasa con Marruecos?”

Esta pregunta dejó estupefactos a los interpelados portavoces de la Comisión de Exteriores del Senado, que reprochaban la “opacidad”, deslealtad y falta de transparencia del Gobierno en su relación con el vecino país magrebí”.

 La abierta crítica de todos los partidos (menos uno) estaba, indiscutiblemente, justificada desde el apoyo expreso de Sánchez, en marzo de 2022, al plan de autonomía marroquí sobre el Sahara Occidental, cambiando la posición de España sobre esta pertinaz pretensión de la dictadura magrebí.

Sánchez regaló a Marruecos su explícito apoyo sin confrontar con nadie: ni con el Parlamento español; ni con Argelia (parte directamente implicada en el conflicto); ni con instancia alguna de la UE. Exteriores borró de su web el texto de apoyo a la libre determinación del Sáhara acorde con la posición de la ONU, dejando constancia de que España ahora apoya a Marruecos. En febrero de 2023 se celebró en Rabat la cumbre bilateral encabezada por Sánchez, donde se firmaron 19 acuerdos entre España y Marruecos. Poco se conoce sobre su contenido.

 La "cándida" pregunta de Albares no tardó en correr por las redes y un aguerrido ciudadano saharaui se apresuró a espetarle esta retahíla con el aplomo y claridad que la causa merece: 

 "Nos pasa con Marruecos, Sr. Ministro, que perpetró una brutal ocupación del Sahara Occidental". Cierto, en 1975. "Nos pasa (…) que bombardeó, torturó, asesinó y cometió un verdadero genocidio contra la población saharaui". “Nos pasa (…) que expulsó a más de 200 mil saharauis a campos de refugiados donde llevan más de 50 años (…)”. “Nos pasa (…) que utiliza a las personas migrantes como presión política enviándolos en masa cuando quiere chantajear (…)”. “Nos pasa (…) que su deseo expansionista reclama territorio argelino intentando invadirlo en 1968 (…)”.

“Nos pasa (…) que también reclama territorio de Mauritania país al que rechazó reconocer, incluso boicoteó el reconocimiento de Naciones Unidas como Estado independiente porque -decían- pertenecía al Gran Marruecos”. 

 Ya estamos como todos los totalitarios de la “Gran Euskalerría” o la “Gran Serbia”, por no mencionar las fantasías de Hitler o Putin. Y continuaba: “Nos pasa (…) que su sed expansionista también afecta al Estado español reclamando como propios Ceuta, Melilla, Canarias y las Islas Chafarinas, las cuales intentó invadir militarmente en 2002”. Recordemos el conflicto de la Isla de Perejil y la desoladora situación actual de las Canarias.

 “Nos pasa (…) que saquea y roba recursos del Sahara Occidental mientras mantiene a la población saharaui en la miseria más absoluta”. “Nos pasa (…) que es un Estado que funciona como si se tratase de una mafia. Hackeó los teléfonos del Gobierno del que usted forma parte”. De este episodio, penden todavía serios interrogantes: ¿qué información inconfesable había en los móviles de Sánchez y/o de su esposa? ¿Parece lógico que tantas cesiones se expliquen solo por la facilidad del presidente a llevar los pantalones “a media asta”? 

 "Sobornó a eurodiputados para salvaguardar sus intereses y hasta el día de hoy persigue a periodistas españoles que se atrevieron a denunciar todas estas fechorías". Afirmación acorde con la 144 posición de Marruecos en la clasificación Mundial de la Libertad de Prensa: no en vano es uno de los 42 países en los que el periodismo se encuentra perseguido.

"Nos pasa (…) que es una narco-dictadura que cultiva, protege y fomenta mafias del narcotráfico que afectan directamente a su país y a la UE". Esto también nos cuadra con el lamentable devenir de los acontecimientos: la desprotección de la Guardia Civil por parte del Ministro Marlaska tras la desarticulación (septiembre de 2022) de OCON Sur, unidad de élite para la lucha contra el narco.

¿Tendrá algo que ver con las cuarenta transferencias de 600.000€, a un paraíso fiscal a nombre del amigo íntimo de Marlaska, hasta completar el blanqueo de la friolera de 24 millones de €? "Nos pasa con Marruecos que puede realizar todas estas acciones y atrocidades porque tiene el apoyo y la protección de personas como Ud y su Gobierno".

 Parecería innecesario agregar más despropósitos a esta sarta de disparates. Sin embargo, no podemos obviar los hechos que diariamente nos sobresaltan por la incompetencia y/o connivencia del Gobierno: la masiva inmigración ilegal, asociada a un récord de las nacionalizaciones de marroquíes, coincidiendo con el estratégico nombramiento en Justicia de Sofía Puente, hermana de Ministro de Transporte, destacada artífice del proceso de transformación del Registro Civil; la entrada de alimentos procedentes de Marruecos "sin el más mínimo" control sanitario con la utilización de pesticidas no aprobados por la UE;

Validez de los carnets de los conductores de camiones marroquíes, asunto sobre el que la DGT guarda absoluto silencio. Por si fuera poco, con el telón de fondo de la "máxima discreción" sobre los acuerdos relativos al espacio aéreo y la delimitación de las aguas territoriales, Marruecos emprende maniobras militares a gran escala frente a las Canarias, mientras Defensa y Exteriores se desentienden y Sánchez de vacaciones; y tras ellas "pasa revista" a las tropas del vecino país magrebí. Todo apunta a que pasan cosas serias (y muy feas) con Marruecos.

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