Todos a la guerra. El rey habló. Señores, el rey habló. Por qué no te callas… El día de los Magos de Oriente, Felipe VI afirmó delante de Sánchez, Robles, Marlaska y a la cúpula de los tres Ejércitos que la guerra en Ucrania justificaba elevar el presupuesto militar. Con su venia, este asciende a 12.825 millones de euros, lo que supone un incremento del 26 por ciento respecto al año anterior y a un 2% por ciento del PIB.

Con su cetro, nos metemos de lleno en una guerra que pagamos todos. Algunos meses antes, Felipe  llamó a los mandatarios de la OTAN a mantener la unidad ante un mundo “más incierto y más peligroso”.

Estamos en guerra. Y todos sabemos o deberíamos saber que en estas situaciones los reyes a lo largo de toda la historia europea, son quienes han dicho y dejado de decir.  Aunque desde el “Descubrimiento” y su desarrollo, algunos o más bien todos,  lo hagan  con mandato de otros, o sea, de quienes los pusieron donde están. Da igual. El resultado es el mismo. Vivimos en el Siglo XXI y seguimos igual.

¡A la guerra! Una que empezó en 2014, en Kiev, con las protestas conocidas como “Euromaidán”. Un golpe de estado organizado por partidos ultraderechistas de línea fascista y sectores nazis apoyados y financiados por EEUU y ahora toda la UE. Una guerra en la que convendría recordar que Ucrania no pertenece a la UE ni a la belicista OTAN. Pero vamos, qué más da, tampoco Israel y miren…

Y allá vamos con nuestra  “Armada Invencible” terrestre. Dos Felipes, casualidades de la vida. España entra con sus Leopards; los 2A4, que necesitan más que una puesta en marcha y los 2E, completamente operativos y deseados por el teleñeco actor judío y también nazi (sí…) Zelenski quien ahora pide además aviones de combate.

Según los entendidos, la “restauración” de algunos de los tanques tardarían meses y la formación para su uso otros tantos. Pero entonces, ¿Cuánto han previsto o quieren que dure esta guerra quienes la han preparado e iniciado desde su golpe de estado? Biden prometió apoyar a Ucrania «durante el tiempo que sea necesario». Pero…necesario ¿para quién o para quienes?

También la “Deutschland Über alles in der Welt”, que en principio se negó a suministrar tanques por ser una clara declaración de guerra a Rusia, al final cedió. Alemania entregará sus Leopard a Ucrania. Y cedió justo en el 80 aniversario de la liberación de Leningrado que fue cercada dos años y medio por los alemanes y causó la muerte de más de 30.000 ciudadanos soviéticos (además de los 24 millones de rusos muertos en la II Guerra Mundial liberando al mundo del nazismo). ¡Qué miseria por parte de Alemania! ¿Acaso sienten nostalgia del pasado? O quizá en su subconsciente colectivo siga clavada la espina de la derrota de su Alemania nazi y ansíe venganza…

El país que algunos dicen que fue el motor de Europa cedió presionado por el imperialismo americano. ¿Le habrán prometido parte del goloso pastel de inversiones posguerra?

Porque, ¿recuerdan el programa de reconstrucción de Irak por parte de la ONU, monopolizado por empresas estadounidenses que resultaron, según dicen, el mayor escándalo de corrupción de la Historia? Y… ¿adivinan quién está detrás de la reconstrucción de Ucrania?

Sí, aquel de “Las Mafias del Agua” con acciones en Veolia y Engie. Aquel que es prácticamente propietario del IBEX, de los medios de comunicación y bancos españoles.  La americana BlackRock.  La primera gestora de fondos del mundo, que financia también, al Departamento de Defensa de EE.UU., a ejércitos, incluida la OTAN  y a redes sociales además de colaborar con el emporio financiero de Soros y otros multimillonarios de las clases dominantes de occidente, Ya ven, todo converge en los mismos de siempre y las piezas del rompecabezas van encajando.

El hecho es que en noviembre se firmó un Memorándum que estableció que  BlackRock asesorase al Ministerio de Economía de Ucrania para su reconstrucción. Es decir, que asesorará, gestionará, supervisará e invertirá fondos nacionales, extranjeros, públicos o privados en Ucrania.

Y pese al sueño censor de Borrell, me resulta interesante apuntar que según el medio oficialista ruso RT, (prohibido por Europa desde principios de 2022)  se cree que una parte de las inversiones occidentales se gastará en la mencionada reconstrucción, pero otra volverá a los Estados Unidos para donar y ayudar al Partido Demócrata.

Desde mi repugnancia a las guerras y a sus muertes inocentes, parece que esta guerra va de algo distinto a la verborrea oficial. Así que por favor: dejen ya de instigar y hostigarnos con el mantra de lo malo que es Putin y de lo buenos que son los demás. De que la culpa de los precios y de todos los granos que nos salen es de Putín, sobre todo si son purulentos.

De que Putin tiene mercenarios horribles, sí, pero ¿acaso la otra parte no los tiene? Incluso estrategas americanos han admitido que el ejército ucraniano (formado no solo por ucranianos) ha sido contratado por EE.UU. como fuerza mercenaria. ¿Acaso la propia OTAN no se puede considerar mercenaria por actuar, provocar y matar indirecta y directamente a las órdenes de Estados Unidos en aras solo a sus intereses geopolíticos, geoestratégicos y de ganancias millonarias?

La realidad es que el dominio sempiterno de Estados Unidos sobre el mundo comienza a  temblar si no a convulsionar ante la sombra del Dragón asiático, y su condición de amos del mundo peligra como nunca. Y si su fin justificaba los medios, la sangre, las torturas de sus Abu Ghraib y sus Guantánamos sin un peligro tan evidente y real como el actual, imaginen ustedes a qué se atreverán ahora. Empezamos a verlo.

Parece claro que es el fin de Europa como tal. Las soberanías, las naciones desaparecen en aras a ser colonias  de EEUU con su servil, marcial y mercenaria OTAN. Se diluyen dentro del nuevo “paradigma” líquido todo él. Todos los ámbitos de la vida convertidos en un “Blandi Blub” lleno de trastornos, locura y perversión. Pero las muertes, las guerras, las violaciones, las torturas, las masacres, la pederastia, la prostitución, la trata, las hambrunas, los trastornos, las locuras,  esas no son líquidas. Esas siempre han sido, son y serán reales.

Y  mientras: con sutil sedosa y fina daga, el Dragón se expande económicamente sin derramar una sola gota de sangre.

“Se puede ganar sin librar una sola batalla”. Sun Tzu: “El arte de la guerra”.

Evite la censura de Internet suscribiéndose directamente a nuestro canal de Telegram, Newsletter

Haz tu Donación

Síguenos en Telegram: https://t.me/impactoespananoticias

Twitter: https://twitter.com/impactoSumustv

Instagram: https://www.instagram.com/impactoespana?r=nametag

YOUTUBE:https://youtube.com/@impactoespananoticias

Odysee: https://odysee.com/@impactoespa%C3%B1anoticias:a

WhatsApp: 635967726