El silencio de Irene Montero desde que supo que Yolanda Díaz rechazaba su presencia en las listas de Sumar no es casual. La ministra de Igualdad y dirigente de Podemos se está moviendo para esquivar el veto de Díaz y lograr un escaño en el Congreso de los Diputados sin necesidad de estar bajo sus órdenes. Montero, trabaja a contra reloj buscando perfiles independientes para armar una candidatura sin las siglas de Podemos con la que poder concurrir a las urnas. Tiene de tiempo para registrarla hasta la medianoche del 19 al 20 de junio.

La intención de Montero y su equipo, según fuentes cercanas a Podemos, es rodearse de perfiles reconocibles de la sociedad civil que apoyen su labor a lo largo de los últimos años en el Gobierno al frente del Ministerio de Igualdad. Con la bandera feminista como principal reivindicación, de tal forma que se convierta en su excusa para justificar ante Sumar que no se trata de un movimiento en contra de Yolanda Díaz. Aunque lo es. Porque Irene Montero «está muy cabreada» con la vicepresidenta segunda y líder de Unidas Podemos.

 La plataforma con la que la ministra de Igualdad pretende mantenerse en el Congreso la próxima legislatura se tendría que presentar como partido político. Y ahí entraría en juego, según las mismas fuentes, la organización registrada «por error» por un trabajador de Podemos hace una semana. De salir adelante la candidatura liderada por Montero, Juntas Sí Se Puede sería el nombre de la lista de la titular de Igualdad y se presentaría por la circunscripción de Madrid. En ella no estarían ni Ione Belarra ni Lilith Verstrynge, que seguirían como números 5 y 4 de Sumar por Madrid y Barcelona, respectivamente.

El hecho de que Belarra y Verstrynge se mantengan en las listas de la plataforma impulsada por Yolanda Díaz responde, explican, a que «Montero no se presentaría por Podemos». Sumar rechazó la posibilidad de que la formación morada pudiera presentar una lista propia en Valencia. No descartan, eso sí, que, junto a la ministra, pudieran incorporarse otros perfiles que han quedado fuera como Ángela Rodríguez Pam o Victoria Rosell. Ambas forman parte en la actualidad del equipo de colaboradoras más directas de Montero en el Ministerio de Igualdad.

Desde Podemos, que ha convocado Consejo Ciudadano para este sábado -mientras se constituyen los ayuntamientos de toda España-, siguen presionando al equipo de Díaz para que levante el veto a Irene Montero. Algo que en el entorno de la vicepresidenta segunda niegan que se vaya a producir. Yolanda Díaz, a diferencia de lo que opinan en Podemos, no cree que la titular de Igualdad sea un activo a día de hoy. «Más bien lo contrario», explican fuentes cercanas a la también ministra de Trabajo y Economía Social y candidata a la presidencia del Gobierno.

 La ministra Irene Montero ha mantenido un cierto silencio en toda la polémica por su veto en las listas de Sumar. Dejando que fueran sus compañeros de partido los que alzasen la voz por ella. Este martes, sin embargo, la responsable de Igualdad reapareció en las redes sociales para cargar contra «los pactos de PP y Vox» tras el suscrito en la Comunidad Valenciana que «ponen en peligro los derechos de las mujeres».

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Fuente original: Okdiario