La unión de las cuencas hidrográficas españolas, el desarrollo de equipos y grupos de acción local a través de las cabeceras de comarcas dirigidos hacia el mundo agrícola, rural y ganadero para su desarrollo y valor añadido quedando en la misma comarca, poner en el centro de las políticas sociales a nuestras familias  y sobre todo, a las más vulnerables.

Auspiciar las políticas preventivas en salud, promover las viviendas sociales, necesitar repensar en el desarrollo del mundo rural, estudiar la salud cultural española, mirar hacia el mundo de las nucleares, el IVA, inversión en investigación científica , generar desde la libertad grandes empresas industriales que conlleven muchos puestos de trabajo junto al mundo de las Pymes. Materias primas tenemos de sobra si de verdad nos lo tomamos en serio: todo ello, puede llevar a poner en la mesa una buena tarta envidiable generadora de riqueza . Por supuesto, las guindas las pondría el mundo del corredor del Mediterráneo.

Hoy, dia 10 de Noviembre, en Ifema Madrid, un milllar de empresarios del sur de España se vuelven a reunir para chequear y reivindicar la infraestructura poniendo en valor el papel del tejido productivo del Sur de España en el mundo de nuestra economía. A pesar de los pesares, más de uno pensamos que existen “personajes oscuros” que desean con astucia y maldad que este país , por causas dispares, no vuelva a ser el que en un momento dado enarbolaba la bandera de tantas y tantas cosas buenas para España, para Europa.

El Corredor del Mediterráneo es un claro eje prioritario para reforzar la competitividad del transporte de mercancias y viajeros y, con ello, contribuir a la generación de empleo y riqueza en España y su conexión con Europa. Es una teoria, una ilusión y casi una realidad irrefutable. Si los gobiernos de España se hubiesen marcado una hoja de ruta desde hace años en cómo marcar un plan estratégico de creación de riqueza para nuestro país otro canto tendríamos ahora en vez de que nos nazcan leyes ideológicas por doquier cuyo único objetivo es la rotura de todo un país cargado de gloria.

Como han sostenido los empresarios del Corredor esta audaz inversión no solo aporta grandes ventajas a la zona sur, sino que permite completar el sistema ferroviario radial con el circular, lo que facilita los negocios, viajes, impulsa el crecimiento económico y, de esta manera favorece la cohesión territorial y la creación de un nudo logístico de primer nivel y de referencia en Europa.

A mi modo de ver,dicho Arco del Mediterráneo permitiría acercar los productos de nuestras empresas a un mercado cada vez más amplio, a precios competitivos, redundando en beneficios para España.

No nos olvidemos que en el Sur se concentra el 50% de la población, el 47% del tejido empresarial, el 63% del tráfico de mercancias portuarias y aporta el 45% del PIB, el 51% de las exportaciones de España y el 50% del turismo extranjero. Claramente, si hubiésemos valorado el Corredor del Mediterráneo hace más de una década, España, poseería mucha más riqueza, más empleo y menos emisiones contaminantes.

El sector agroalimentario es uno de los sectores que más necesita esta infraestructura. Aparecerían , casi posible, más de 20.000 puestos de trabajo. Piensen en las pequeñas empresas que nacerían a causa del Corredor. 

Nos situamos a fecha de hoy en un nuevo chequeo de creación de riqueza, mientras, ayer 9 de Noviembre, el Parlamento Catalán con su mundo independentista aprobaba una burrada de millones no para invertir en creación de riqueza en nuestra querida Cataluña, sino más bien en lanzar a los aires globales lo mal que lo hace España hacia Cataluña.

Esta es una de tantas y de tantos que no están por la labor de una España que empuje, que se supere, que diga ¡así crece un país! Mentalidades obtusas siempre las habrá.

No nos olvidamos del Norte de España. Allí existe un mundo emprendedor fuera de lo común, seguro que potenciar la industria e invertir desde el mundo naviero a tantísimos lugares supondría un gran acierto. Más aún, a nuestra querida Portugal no hay que olvidarla: la unión hace la fuerza. 

Por tanto, si dejamos de mirarnos a los ombligos desde los distintos virreyes de España y pensamos en nuestro país en su conjunto todos saldremos ganando.Crear riqueza para España y puestos de trabajo más buena formación para nuestros ciudadanos es apostar en serio.

¡ Deseamos y Queremos Corredor del Mediterráneo!

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