Antes de que la Fiscalía del Tribunal Supremo archivase las tres causas contra el emérito, cosa esperada y a lo que nos tienen acostumbrados a todos los españoles, la televisión, sus noticieros y tertulianos oficiales, o sea, todos, llenaban sus espacios y su trabajo preguntándose si el real “debía” venir a España o no, como si el susodicho esperara la aquiescencia del pueblo. Después, el “chascarrillo” oficial era cuándo y en dónde iba a posar sus reales…

Y es que parece que ahora, el emérito está aburrido, triste, como la princesa aquella de Rubén Darío (¡Oh quién fuera hipsipila, en este caso hipsipilo… que dejó la crisálida!). Al parecer puede que vaya a Portugal para desplazarse fácilmente a Sanxenso y navegar con su amigo Bribón antes de Navidades, fechas en las que parece ser que siempre ha deseado volver.

El premio de la lotería nacional este año sería que viniese para llevarse definitivamente y para siempre a toda su familia y allegados a donde fuese y de paso dejasen de cobrar de los presupuestos generales del estado, que por otra parte, no creo que sea el sustento real de la familia pero al menos, se podría invertir en necesidades del pueblo, por ejemplo en la esquilmada, agotada y maltratada sanidad pública.

Pero vamos, que se vayan donde quieran, faltaría más. El mundo es muy grande, sobre todo para quienes pueden. Mejor un sitio donde haya elefantes, que dicen que tienen mucha memoria, no como el pueblo español, desgraciadamente. Únicamente, cuídense de los viejos elefantes machos con mucha ornamenta. Los expertos en el tema afirman que, aparte de su memoria prodigiosa son agresivos.

Según algún periodista, parece que el rey hijo, “no tiene ni idea” de las intenciones del padre. Bueno, ya sabemos que en este país las mujeres de… no tienen ni idea de lo que hacen sus maridos y claro, el rey no va a ser menos y no va a tener idea de la voluntad de su padre de quien heredó la corona…

Por otra parte, Pedro Sánchez declara a prensa que tenemos un gran rey; que separa las acciones del padre y del hijo (del Espíritu Santo no ha dicho nada, creo…); que no cree necesaria la inviolabilidad del rey actual porque eso es producto de otra etapa legítima de nuestra democracia pero que no estaba todavía consolidada.

Yo me pregunto, ¿lo de quitar la inviolabilidad del rey actual es porque todo va a ser transparente o es transparente o simplemente para que creamos que existe esa transparencia sin haberla? Porque a estas alturas, todos sabemos que en las altas esferas la falta de transparencia se esconde o disimula muy bien, en el caso de que la haya claro está.

Como colofón, el presidente del gobierno ha afirmado que el Psoe no va a entrar en un debate sobre la institución o el modelo de Estado, que está comprometido con la monarquía y que no apoya las comisiones de investigación que otros partidos piden en el Gobierno porque se plantean en términos de monarquía y república.

Nada nuevo bajo el sol. El Psoe, esos socialistas “republicanos juancarlistas”, los mejores garantes de la monarquía en este país pese a las cunetas llenas de sus compañeros asesinados impunemente terminada la infame guerra incivil…Vaya partido señores, qué vergüenza… Qué dignidad, qué suciedad, qué traición.

España, ese pedúnculo de tierra al final de Europa, lleno de casos archivados y de tramas y corrupciones que ni se denuncian ni se investigan. Esa dejadez por parte de las instituciones para enriquecerse unos, otros y terceros como en ese tan querido por algunos y vilipendiado, envenenado y asesinado por otros, Mar Menor.

Si hay vida fuera, si encontrasen en un futuro nuestro planeta con sus archivos comprimidos “zip”, ¿qué entenderían por “humanidad”? ¿Cuál sería su registro? ¿Qué pasaría al descomprimir todos esos casos archivados en un archivo zip? ¿ Sería letal para sus formas de vida y su planeta? ¿Es posible que fuesen inmunes o simplemente no entenderían tanta necedad, inmundicia y monstruosidad? No lo sabemos y sospecho que no lo sabremos nunca.